Durante el día, Driver trabaja en un taller y también como conductor especialista de cine pero, algunas noches, de forma esporádica, trabaja como chófer para delincuentes. Shannon, su jefe, que conoce bien su talento al volante, lo mismo le busca directores de cine y televisión que criminales que necesiten al mejor conductor para sus fugas, llevándose la correspondiente comisión. Pero el mundo de Driver comienza a cambiar el día en que conoce a Irene, una atractiva vecina que tiene a su cargo un hijo pequeño y a su marido en la cárcel.