En plena Guerra Fría, la dictadura de Onganía organiza el Festival de Cine de Mar del Plata para mostrar una imagen de apertura hacia el mundo, mientras en el país continúan la represión y la censura. A partir de un profundo trabajo de investigación el documental da muestras de la vigilancia estatal y de la historia de una resistencia secreta: una sociedad cultural de comunistas eslavos creada para infiltrarse en el Festival y establecer contacto con las delegaciones de los países socialistas.

