Tras el atraco a un banco fronterizo, Johnny Río es traicionado por Dad, su mejor amigo y compañero de correrías. Capturado por la policía mexicana, pasa cinco amargos años en la prisión de Sonora. Durante esos años, ha vivido con la única idea de vengarse del traidor. Ahora que lo han puesto en libertad, visita a Dad, que se ha convertido en un hombre respetable y es el sheriff de Monterrey.